Punto y seguido a las fiestas.

Ponemos momentáneamente el telón por clausura a las fiestas navideñas, con apertura para el 31. Días de familia, alguna que otra llamada que quiere matar el silencio de las sillas vacías, y adorando potes de arco iris, y es que el perfume de “Poussoin”, fue ovacionado por todos los comensales, lo que también me hace corroborar mi teoría respecto a mi tía: es una pija sin dinero. Una aburguesada de la sociedad con aires de grandeza, arropando su cuerpo de Adolfo Domínguez, Burberry´s, Ralph Lauren, y otras muchas marcas de imposible adquisición para la prole. Y eso sí, siempre haciendo gala de sus arrugas provocada por su eterna sonrisa, es la que aliña la cena y demás comida con su verborrea inagotable. Y estás navidades, me he dado cuenta que a mis abuelitos los años les empiezan a pesar, especialmente a mi abuelo, con eterno espíritu vitalista. Llevo de acompañante (aparte de mi abuelita, claro esta), a mi muleta, y es que la rodilla le empieza a fallar ya que la tiene bastante desgastadilla, así que próximamente… movilización de la familia para su inapelable operación. Y ahora hablando de hospitales, me tengo que remitir a Y. Me escribió un SMS diciendo que su madre podría tener cáncer, y que hasta que al lunes (o sea sé hoy), no sabrían nada, pasado unas Navidades con cierta incertidumbre, y en espera. La verdad es que me choco la noticia un poco, y a pesar de que a mi misma me había prometido eclipsarme, y desaparecer, aplasto las palabras, y le doy toda una caja de ánimos. Ayer, no sé por qué reinicia nuevamente la lectura de “Un milagro en equilibrio”, y sus letras abrasaron mis ojos. Por primera vez acabé llorando con un libro, y es que eran demasiadas coincidencias con la protagonista, demasiadas similitudes… y me hizo remover cosas del pasado que creía olvidadas, y cerradas con candado, pero ese fardo siempre florece cuando menos te lo espera. Y hoy, toca hacer un mini-brindis, ¿y por qué? Se preguntarán mis queridos lectores… muy sencillo. Hoy, soy nuevamente fértil!!!! Hecho que no sería digno de celebración si se produjera cada mes si hembra productiva fuera, pero como tal acontecimiento se prorroga más de lo usual sin saber nunca cuando me va hacer su respectiva visita…. Por eso motivo la recibo con todas las congratulaciones que se merece!!!! (y es que ella tiene la deferencia de ponerse el traje rojo de gala)